Cripta San Antolín
Estampas Palentinas
Si visitas la Cripta de San Antolín verás los orígenes de la catedral de Palencia y admirarás la belleza del arte románico y visigodo, el arte del siglo XI junto al del siglo VII.
Cuenta la leyenda referida a la cripta, recogida en el cantar de gesta las “Mocedades del Cid”, que el rey estaba cazando en Palencia y cayó en una hoya cuando cabalgaba. Vio una cueva y un epitafio que le informaba de que hace trescientos años ese lugar había sido derrumbado, que había un cuerpo santo en el lugar.
La cripta se construyó por orden del rey Wamba, que trasladó desde Narbona las reliquias de Antolín de Pamiers, visigodo perteneciente a la familia del rey Teodorico, que abrazó el catolicismo, a pesar de haber sido educado en el arrianismo, y acabó recibiendo el martirio en torno al año 506 en la ciudad de Pamiers.
Brillan los peldaños de piedra de las escaleras, desgastados por el paso durante siglos de miles de visitantes, sobre todo cada 2 de septiembre, día de San Antolín, patrono de la ciudad, en el que un impresionante número de palentinos cumplen con la tradición muy arraigada en la ciudad de bajar a la cripta a beber el agua consagrada, pedir al santo un deseo y arrojar una moneda en la parte visigoda pidiendo suerte.
Al entrar en la cripta sorprende cómo en tan reducido espacio nos encontramos con un escenario fantástico en el que se dan cita el arte románico y el visigodo. La cripta es, para mí, el espacio más mágico de la catedral, un lugar único que nos traslada a una ermita románica del siglo XI con cuatro tramos, cubierta de bóveda de cañón que soportan arcos fajones de dovelas irregulares apoyados en pilastras sobre zócalo corrido y ventanas de medio punto. Destaca el pozo con el brocal, decorado con elegante traza plateresca como la escalera de acceso a la cripta. Se tenía la creencia que el agua que se sacaba del pozo era milagrosa. Hace unos años el agua se sacaba del pozo, pero últimamente se sirve embotellada para evitar la infección por bacterias. Una estatua de San Antolín, apoyada en un pedestal, observa a los palentinos que beben el agua, tocan la estatua y piden al santo un deseo. En la parte visigoda de la cripta es tradición lanzar una moneda y pedir un nuevo deseo.
Durante años he bajado a la cripta a cumplir la tradición y beber agua del pozo, que depositaban en tinajas. También arrojaba una moneda en el hueco de la zona visigoda. Siempre que he entrado en la cripta he tenido sensaciones de estar en un espacio único dentro de una gran y bella catedral.
SOBRE ESTA BITÁCORA

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Qué bien dibujó y pintó cada piedra prerrománica de la Cripta de San Antolín, las de la bóveda de cañón, las de los arcos fajones, pilastras, y ventanas de medio punto. Pintó la estatua del santo con su basamento, junto al altar cubierto de un lienzo rojo, y al arco que da paso al inicio cronológico de la cripta, del siglo XI a la del siglo VII, en la que se aprecian dos columnas visigodas y los arcos de herradura. Sin duda un acierto dibujar y pintar nuestra cripta con tanta delicadeza y belleza.
ResponderEliminarNos presentáis hoy en esta sección de Estampas Palentinas, Paqui y Alfonso -la primera con su bello dibujo y el segundo con su afable literatura- uno de los rincones de nuestra excelsa catedral más visitados y que más sorprende a quienes visitan a nuestra "bella desconocida", hoy "bella reconocida" ya. En efecto, porque este escenario que nos presentáis, aparte de sus leyendas al respecto, nos habla del origen actual de nuestra bella catedral, levantada sobre esta famosa Cripta de San Antolín que tanto llama la atención de nuestros muchos visitantes. Saludos.
ResponderEliminarInsistimos en imágenes e historias en las que ya nos hemos detenido en otros post.
ResponderEliminarPero no se cansa uno. Poco a poco iremos rescatando también lugares de la provincia, en esa crónica viva de Alfonso, tan bien acompañado por nuestra colaboradora en Salamanca, Paqui González del Castillo. Un placer para los sentidos.
👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻👏🏻 Espacio único
ResponderEliminarBuen artículo el de hoy de la cripta. Ágil y en corto espacio un recorrido muy completo. Te felicito
ResponderEliminarAprecia J. Javier Terán, tanto el dibujo como el texto, mientras que el Curision de Froilán lo aprecia como una “crónica viva”, bien acompañada por la pintora salmantina. Rubén, guía de la catedral, envía aplausos y opina que es “un espacio único”, mientras que Riaza ve el escrito ágil con un recorrido muy completo. Muy agradecido amigos por vuestros comentarios.
EliminarMuy bueno el texto y el dibujo, también.
ResponderEliminarMuchas gracias, Julián, me alegra que te gusten indistintamente la parte pictórica y la narrativa.
EliminarExcelente este capítulo de la cripta, un monumento visigodo con sus leyendas que se remontan hasta los principios de la Edad Media, sin duda un sitio mágico. Gracias por traérnoslo hoy, Alfonso. Y gracias a los comentaristas por apreciar mi dibujo también. Muy agradecida.
ResponderEliminarLa Cripta románica es algo único en las mismas entrañas de la catedral. Desde allí como si de un vientre fecundo se tratara surgió el grandioso monumento que tenemos paisanos y foráneos el privilegio y el orgullo de disfrutar.
ResponderEliminarBuen reportaje Alfonso, buena imágen Paqui.
En vuestra línea. Gracias por estos regalos que nos hacéis con tanta asiduidad.
Quien mejor que tú, amigo Javier, para valorar la Cripta como algo único, y hacernos sentir, a Paqui y a mi que nuestros esfuerzos han sido reconocidos de forma tan satisfactoria, que raya la emoción. Infinitamente agradecidos.
EliminarEstá Cripta que tan bien describes, por mí profesión de fotógrafo la he inmortalizado muchas veces, incluso con novios, con ese entorno quedaban unas fotos espectaculares.
ResponderEliminarEn cierta ocasión debía de hacer una foto de la Cripta para una publicación importante.
Me dirigí a la sacristía a pedirles la llave y me acompañó un monaguillo, se le veía un chico espabilado, tendría no más de 11 años, David se llamaba.
Empecé a montar trípodes, luces, la cámara ... Y me dice con respeto ¿Quiere que se la enseñe? Me hizo gracia la iniciativa del muchacho.
Le he seguido viendo desde siempre. Ya hombre, una persona simpática, amable, buena persona. Siguió de monaguillo, se metió cura, ha sido cura de pueblo y ahora es Canónigo de la Catedral.
Este niño ya prometía.
De las fotos espectaculares que hacías eran culpables la Cripta y su entorno, pero por encima de todo estaba tu maestría para colocar a los novios y apretar el gatillo para sacar una obra de arte.
EliminarCurioso lo que te ocurrió con el monaguillo, en principio pensé en Inacito, pero ya veo que el monaguillo, cura y canónigo subió a los altares del Cabildo Catedralicio, seguro que lo conozco.
Este artículo sobre la Cripta de San Antolín es un paseo delicioso por la historia y la magia de un rincón único en la catedral de Palencia, perfecto para este blog donde nos encanta descubrir joyas culturales. El autor escribe con una pasión contagiosa, como si estuviera guiándote de la mano por esa escalinata de piedra, contándote las leyendas y los detalles con un cariño que se siente genuino. El tono es informativo pero cálido, con un toque poético que hace que la cripta cobre vida.
ResponderEliminarMe gusta cómo mezcla datos históricos, como la construcción ordenada por el rey Wamba o los bajorrelieves del martirio de San Antolín, con las tradiciones vivas, como la de beber agua consagrada y arrojar monedas cada 2 de septiembre. La descripción de la cripta como un “escenario fantástico” donde se cruzan el arte románico y visigodo es muy visual, y detalles como los peldaños desgastados o el brocal plateresco te transportan al lugar. La mención personal del autor, que confiesa haber bajado durante años a cumplir la tradición, le da un toque íntimo que conecta con el lector.
Felicidades.
Me asombra Marcos la perfecta radiografía que haces de mi escrito con palabras que me alaban, con detalles que no todo el mundo aprecia, o sabe expresar, y que a mí me llenan de orgullo y me confirman que el escrito ha llegado a los lectores, y me anima a seguir en esta línea. Muy agradecido por tu excelente comentario, adorno perfecto que da aún más vida a mi relato sobre la cripta.
EliminarEl gran Alfonso retratando cualquier evento o monumento de Palencia. En esta ocasión ha tocado la cripta, el origen del templo mayor de nuestra diócesis. Sigue disfrutando y abriéndonos una ventana a la cultura de Palencia.
ResponderEliminarHay anónimos que se retratan por lo que dicen y cómo lo dicen, en este caso el anónimo me hace retratista, en esta ocasión de la cripta "el origen del templo mayor de nuestra diócesis". Seguiré. amigo, disfrutando y abriendo nuevas ventanas de la cultura palentina. Me das ánimos amigos para seguir intentándolo. Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, querido Alfonso.
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