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Paseo por Valderejo
En el otoño de 2013 decidimos conocer el Parque Natural de Valderejo, en la provincia de Álava. Juantxu se presta a todo; mejor dicho, se prestaba, hasta que se le antojó emigrar a Galicia, viajando siempre que podíamos por pueblos y ciudades del norte de España. Así conocimos centenares de pueblos y lugares: Cantabria, Asturias, Navarra, País Vasco y La Rioja, donde te ibas encontrando con los caminos de la historia. Pueblos y rincones que de otra manera no llegarías a conocer nunca. Mi abuela Lorenza, que era muy folklórica, decía: "A correr por los pueblos, que dan pan y tortas", no sé si lo decía para escurrirnos, o si es por casualidad, pero como si aquella carrera la estuviera adivinando.
Aquel día comimos en Berberana, una localidad situada al norte de Burgos, en el restaurante de Amparo, que nos atendió de lujo, de manera que hemos vuelto media docena de veces, siempre que pasábamos cerca.
Valderejo fue declarado el Primer Parque Natural en 1992 donde se encuentra la colonia más numerosa de buitre leonado del País Vasco. Este viaje nos ha llevado por un paisaje prácticamente despoblado, lo que favorece sin duda la existencia de una fauna variada. Son numerosos los senderos señalizados que permiten el conocimiento de gran parte del Parque. Accedemos al mismo por el valle de Valdegovía, desde le población burgalesa de San Millán de San Zadornil, que limita por el noroeste con Valpuerta, una penetración geográfica en tierra castellana, una de las cunas de nuestra lengua, donde adquieren gran relevancia los famosos Cartularios, pues allí aparecen las primeras palabras escritas en esta lengua.
Cualquier tiempo es bueno para viajar hacia tantos rincones que se encuentran a pocos kilómetros de casa, como este parque, donde se cita por sus rutas al desfiladero del río Purón. En Lalastra se localiza la Casa del Parque y el Museo Etnográfico donde puedes documentarte sobre las costumbres de este valle. Algunos pueblos abandonados, restos de una calzada romana, ermitas y monumentos megalíticos, como digo, uno de tantos lugares para disfrutar de la Naturaleza y descubrir pueblos llenos de historia.
Valderejo fue declarado el Primer Parque Natural en 1992 donde se encuentra la colonia más numerosa de buitre leonado del País Vasco. Este viaje nos ha llevado por un paisaje prácticamente despoblado, lo que favorece sin duda la existencia de una fauna variada. Son numerosos los senderos señalizados que permiten el conocimiento de gran parte del Parque. Accedemos al mismo por el valle de Valdegovía, desde le población burgalesa de San Millán de San Zadornil, que limita por el noroeste con Valpuerta, una penetración geográfica en tierra castellana, una de las cunas de nuestra lengua, donde adquieren gran relevancia los famosos Cartularios, pues allí aparecen las primeras palabras escritas en esta lengua.
Cualquier tiempo es bueno para viajar hacia tantos rincones que se encuentran a pocos kilómetros de casa, como este parque, donde se cita por sus rutas al desfiladero del río Purón. En Lalastra se localiza la Casa del Parque y el Museo Etnográfico donde puedes documentarte sobre las costumbres de este valle. Algunos pueblos abandonados, restos de una calzada romana, ermitas y monumentos megalíticos, como digo, uno de tantos lugares para disfrutar de la Naturaleza y descubrir pueblos llenos de historia.
Imágenes: Shaila. P. M. / Curiosón
Viaje al Kursaal
En recuerdo a Jesús Coria, un amigo que nos dejó recientemente
Bilbao no es ya lo que escribía el poeta Jesús Alonso Burgos, palentino que ejerce como abogado en Barcelona: "En Bilbao no hay quien diga una palabra de desánimo, mientras el humo de las fábricas sigue tan lento que parece llevarse prisioneros a los muchachos de los barrios"... Pero siempre queda flotando en el ambiente una especie de efecto o de postal que nos hace recordarle así, tal como fue. El azar, que puso en mi camino esta ciudad para vivirla, me acercó también la amistad de dos hombres con quienes este año, hace unos días, he compartido una jornada en la perla del norte. Javier y Jesús, que ya experimentaron la cosa del infarto, el aviso de que la vida ha de tomarse con relajo, conscientes de que por mucho que corramos la vida es una academia en la que nunca nos llegamos a graduar, viendo crecer sin motivos mayores mi depresión de otoño, decidieron llevarme a la Feria Gastronómica de San Sebastián. Javier Álvarez, directivo de una de las empresas patrocinadoras, me pasa una invitación a su regreso de Burgos, con la consiguiente dosis de humor que le caracteriza: "A ti te he incluido en la relación como columnista de Diario Palentino".
La Kursaal, el palacio de Donosti, obra de Rafael Moneo, se recuesta ligeramente sobre el mar, como negándose a sumergirse en él, lo mismo que su río, el Urumea. En su interior, en la planta habilitada para la muestra, se dan cita más de medio millar de productos de élite: Cerveza San Miguel, Vino de Cariñena y de La Rioja, vinos de Rueda, carne del País Vasco, Brandy de Jerez, y conservas de Navarra, productos elaborados artesanalmente, algunos amparados por los Consejos Reguladores de la Denominación de Origen. Ajenos al temporal que azota fuera, iniciamos la visita deteniéndonos en el primer puesto, donde expone sus níscalos el Mercat de la Boquería. Jesús Coria, amante de la buena mesa, como dio a entender después en la Sociedad donde comimos, montaraz aficionado y cocinero de postín, va describiéndome los detalles de las setas expuestas. Allí estaba también Conservas Serrats, de Bermeo; se cree que es la primera empresa que utiliza latas litografiadas para empacar sus productos a primeros de siglo.
Observamos en otro puesto los curiosos comportones, como se denomina en algunas zonas de La Rioja a los canastos que servían para transportar uva, primero haciendo uso de las caballerías y después de las lonas. Y allí se dieron cita, asimismo, los mariscos Oviñana, donde degustamos la caballa ahumada; las bodegas del Marqués de Riscal, las conservas de Santoña, los sobaos Ortiz Sañudo, también de la Comunidad cántabra y las yemas de Santa Teresa de Ávila, donde Silvia Girón nos explica la historia de esta empresa fundada en la ciudad del Tormes en 1860, y la composici6n de este producto elaborado a base de azúcar y fruta, fruta que se compra en Don Benito y que se importa también desde países hermanos como Chile y Argentina.
Lo cierto y concreto es que yo vine a darme un baño de alegría, vine a curar mi depresión, como Isabel II vino a aliviar su mal de piel, o como vino después María Cristina, o como viene hoy tanta gente a esta ciudad de doscientos años, a esta ciudad marinera, de puertos y tabernas, de playas y colinas. La disculpa, que empezó con un concurso de tortilla de patatas, cuyo premio fue a parar a manos de un gallego, tuvo su colofón para nosotros en la Sociedad Sansustene, inaugurada el pasado año en el barrio El Antiguo. Allí compartimos mesa y aficiones con los pupilos de Javier: Koldo, José Mari y el pelotari Ansotegui, campeón de España que fuera en su categoría de este deporte vasco. Cuenta uno de los periodistas destacados en la feria, lo que allí mismo le contó Felipe Gutiérrez de la Vega, de la casa Casta Diva: "Nos aplasta la competencia, la comercialización, el estrés..."
Y es verdad. La vida es una apisonadora que despacio nos mella. De pronto alguien nos roza, como a mí me rozaron estos buenos amigos, sumergiendo mis sentidos en una fuente milagrosa, tal es el caso de esta ciudad encantadora, devolviéndome las papilas gustativas, y, de este modo, como el mar aplaca su furia contra los farallones, yo vuelvo a rescatar mi historia a la ciudad donde vivía.-
Actualización Feb2025 | 314👀
LA MADEJA
Cada viernes en la tercera de Diario Palentino
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