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Otoño en la Basílica

Basílica de San Juan de Baños


Baños de Cerrato


Dedicado a Víctor Andrés Ruiz, alma de la Basílica (*)



Cuando avanza el otoño inicio mi segunda visita a la Basílica de San Juan de Baños, para ver el contorno y la iglesia en esta época del año. Camino desde Venta de Baños a Baños por la amplia acera, que se encuentra al lado derecho de la carretera, escoltada de arbolitos que desparraman sus hojas por las cavidades que limitan su perímetro. De especial belleza son las hojas que permanecen en los árboles desde que nacieron en primavera, y languidecen en el preámbulo de su ocaso otoñal, con una llamativa y preciosa mezcla de colores. Poco antes de la entrada en Baños, buenas fincas y chalets se aposentan a ambos lados de la carretera, con curvas y contracurvas hasta su final en la Basílica. Hay más árboles en la acera, hasta que una recta me lleva al Mirador de la Vega, encantador lugar para sentarse o apoyarse en la barandilla de madera y otear la atalaya de Tariego, sus bodegas e iglesia, los cerros que me llevan hasta Hontoria, donde asoma su iglesia entre vaguadas, y los rojizos montículos conocidos como Las Derrumbadas. Un buen lugar este mirador para meditar, y sentir el placer de admirar la vega y la original belleza del paisaje cerrateño.

Mientras me acerco a la Basílica, viejas casas, casas nuevas, traseras, portalones y portales me llevan hasta el Mesón del Lagar, buen lugar para yantar. Descubro la amplia plaza con el nombre de la iglesia más antigua de España, a la vez que me adentro en el bello y bien ornamentado parque, donde se encuentra la fuente visigoda de Recesvinto, declarada Bien de Interés Cultural. Esta fuente es la única de este tipo que podemos encontrar en toda la Península, una fuente que a lo largo de la historia pasó de ser una poza en la época visigoda, en la que se realizaron baños de inmersión y bautismos, hasta que con el paso de los siglos quedó en el olvido y desapareció el arco de la derecha, que fue reconstruido en el año 1941, según explica la placa que se encuentra en la fuente. Este 1941 fue el año en que probablemente se instalaron los cuatro caños y el pilón. La fuente volvió a ser conocida y valorada en el siglo XIX, gracias a Pascual Madoz, que llamó la atención del estado de abandono de esta fuente, y lo plasmó en su famoso diccionario.


Al llegar al exterior de la Basílica me sorprenden los anaranjados arbolitos que custodian el templo en una mezcla prodigiosa en la que el verde se esfuma a favor de un naranja chillón. Los álamos del parque se elevan por encima del monumento casi desnudos, dejan caer sus hojas moribundas, a la espera de que el viento, las heladas, el invierno y las primeras nevadas las pudran. A lo lejos veo los inconfundibles cerros y laderas de los montes de Dueñas, Villamuriel, Palencia, del Monte el Chivo, del de Magaz, Valdeolmillos y Villamediana. Bordear todo el perímetro del monumento es disfrutar de los elementos que refuerzan el templo, arbotantes, celosías, muros, la espadaña sin campanilla, la cruz patada, los arcos, un sinfín de detalles que te hacen sentir la belleza de un edificio incomparable.


Antes de entrar en la Basílica recuerdo que voy a visitar la que, posiblemente, sea una de las iglesias visigodas más importantes que conocemos. Según entro me siento como si fuera el rey Recesvinto con su séquito, y cruzo como el soberano visigodo, el magnífico pórtico de entrada. Me recibe mi amigo Víctor Andrés, quizás el mejor y más apasionado y amante guía que tuvo la Basílica. Observo como la luz natural penetra a través de las celosías, una luz con rayos tenues a los que les falta la fuerza de los que vi en verano, pero el diferente aspecto del monumento en esta época del año no lo hace perder interés, más aún si se mantiene su puerta abierta

Coincido en la visita con Mónica Figuero, guía que explica la bella y monumental iglesia de San Pedro de Fuentes de Nava. Comienza Víctor la explicación del interior del monumento, docta lección de arte, que se interrumpe por las interesantes preguntas que efectuamos Mónica y un servidor. El guía de la Basílica nos resuelve las dudas, en una amplia y convincente exposición, con soltura, elegancia y sapiencia. En mi opinión, al día de hoy, este buen guía es la persona más estudiosa, y que más sabe de esta maravillosa Basílica. Disfruta el historiador mientras explica, difunde secretos que emanan de su amplio conocimiento, y quienes escuchamos su lección nos extasiamos al conocer que San Juan de Baños es la iglesia más antigua de España, lo demuestra la lápida que se conserva en el techo, y la réplica colocada en uno de los laterales del edificio.


No me canso de escuchar a Víctor, su lección es especial me recuerda a un antiguo profesor de arte, en mis clases de bachillerato en el Instituto Alonso Berruguete, Ángel Iglesias, que con su seductora explicación nos hacía desear ir de excursión a las catedrales y otros monumentos. Las explicaciones del guía de la Basílica se hacen muy amenas, saben a poco, a pesar de que la visita duró al menos 45 minutos. Víctor Andrés tiene la ilusión de que, por parte de los organismos competentes, se trasmita a la juventud la posibilidad de visitar y conocer la Basílica, un monumento con 1300 años de historia, que sitúa en una de las mejores posiciones en España y Europa en cuanto a valor artístico y patrimonial.


La Basílica me hechiza en cualquier época del año, la he visitado de madrugada, al amanecer, a media tarde, por la noche, en Noche Buena, Noche Vieja, Navidad, voy siempre que puedo. El edificio me tiene conquistado y ensimismado, cada vez que lo visito descubro algo nuevo, siento como el monumento me espera, me reconoce, me inhala de todo su misterio, despierta mi curiosidad, me llena de gozo con su belleza y secretos. Es un lujo para mí disfrutar de la Basílica, como lo es tenerla aquí en Baños. Es un lujo para Baños, Venta de Baños, Palencia, Castilla y León, y España. Difundamos nuestro rico y valioso patrimonio, que en este caso es único y de extraordinaria calidad.

Imágenes: Alfonso Santamaría/Victor Andrés
Arquerías, De Roinpa -commons.wikimedia

(*) Mi agradecimiento a Víctor Andrés Ruiz por su valiosa divulgación de los datos históricos y artísticos reseñados en este artículo.

Para saber más, en Curiosón:





40 comentarios:

Ramón Gil Zorrilla dijo...

Alfonso, la narración de tu Basílica es, a oídos nuestros, un paseo a través de ella, por medio del entusiasmo de tus palabras podemos saber su antigüedad, sus secretos, su construcción y su historia de los 1300 años, y de las personas que cuidan ese entorno arquitectónico. Como siempre, Alfonso, te has superado.

El Trauma dijo...

Buenos días, Alfonso. Buen trabajo. Como siempre, buena y detallada descripción, con la soltura que te caracteriza en la redacción. Sigue con ello. Es tu verdadera vocación.

El Cunetas dijo...

Muy buen artículo.

Javier Campos dijo...

Que vayan preparando un sillón de académico en la Tello Téllez porque al paso que llevas en la producción literaria seguro que entras. ¡¡Eres un artista!! Un abrazo

El Farmapócimas dijo...

Bravo Alfonso

El Halcón dijo...

Eres todo un maestro de la prosa poética, Un poco extensa para mi gusto, pero genial. Cómo se nota que ahora tienes tiempo para soñar. ¡Dale a la pluma y no dejes de escribir!

Jesús López Ocasar, cerrateño dijo...

¡Muy bueno!

Juan Carlos Marcos dijo...

Muy bueno Alfonso. Lo explicas tan bien que, quien no lo conozca se quedará ilusionado y no le quedará más remedio que ir a visitarlo. Vendes muy bien la provincia. Enhorabuena. Un abrazo.

Jesús Hernández (Itu) dijo...

Gracias por hacernos de guía Alfonso. La verdad es que nunca la he visitado a pesar de haber estado tan cerca varios años. Otro lugar más para visitar en nuestra olvidada tierra palentina.
Jesús Hernández (Itu)

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Cuanto me alegra Ramón haberte hecho pasear por la Basílica a ti que vives lejos de ella, pero que tuviste la oportunidad de conocer y admirarla este verano.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Amigo Antonio, sabio consejero amigo interminable, siempre me guiaste y fuiste la luz de mis escritos. Agradecido siempre.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Gracias amigo César.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Me elevas Javier a una categoría que no me pertenece, pero se que lo expresas con verdadero deseo y te lo agradezco.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Agradecido como siempre, amigo Luis, tus palabras me animan a seguir.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Tienes razón que soy de prosa extensa, pero es difícil evitar esa mala costumbre, cuando quieres que aparezca hasta el último detalle. Me ha agradado mucho recibir tu comentario. Gracias amigo Juanjo.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Cerrateño de Cevico, amante de tu pueblo, tu si que eres bueno, amigo Jesús.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Amigo Juan Carlos, me agrada mucho que valores lo que escribo, que lo disfrutes, y pienses que vendo muy bien la provincia.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

No sabes lo que te pierdes amigo Jesús. En tu próxima visita no olvides visitar la Basílica, no te va a defraudar.

Iturriaga dijo...

Cualquier día te vemos con un paraguas de colores rodeado de turistas haciendo de guía.

Cuartos Traseros dijo...

Enhorabuena por tus descripciones tan precisas que te hacen sentir que estás ahí mismo.

Perdiguero dijo...

Ágil y certera pluma de Don Alfonso, en la magnífica descripción que hace de nuestra querida Palencia.

Traviator dijo...

Hay personas que a la vez que cumplen años mejoran su capacidad intelectual. En el caso de nuestro amigo Alfonso, no solo escribe mejor, sino que también está mejorando su físico y cada vez pedalea mejor. Gracias, Alfonso, por tu dedicatoria a nuestra joya de la Basílica de Baños. Es largo pero muy entretenido.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Me gusta ese oficio, más aún si los turistas son amigos.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Amigo Santi, cuanto me alegra hacerte sentir que visitas la Basílica. Nuestro Grupo la visitará muy pronto, en su primera excursión en bicicleta.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Gracias Don Pablo, Marqués de Tabanera, amante del Cerrato.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Hay personas que ya muy maduras mantienen una asombrosa superactividad, se enfrentan con valentía a dolencias, que otros seríamos incapaces de superar. Ejemplos como el tuyo, Traviator, hay muy pocos. Te aprecio, te admiro y te quiero.

Marqués de Tabanera dijo...

Gracias a tí, amigo Alfonso.
He visto algún comentario respecto a la extensión de tus palabras. En ese aspecto concreto, te diré que a mí se me hace corto, por ameno y por los detalles que describes. Esa minuciosidad, esos detalles, pasan desapercibidos "al gran público" y yo te los agradezco pues, en muchos casos, son la esencia de la descripción. Esta es mi opinión, seguro que las hay mucho mejores. Gracias amigo. ¡Un abrazo!

César Merino dijo...

¡Fenomenal descripción, Alfonso!
El monumento bien merece el cariño que le dedicas y que transmites tan bien con tus palabras.
Un abrazo.

El Pretor (wassap) dijo...

Amigo Alfonso, leí tu artículo sobre la basílica de Sa Juan Bautista, ¡Magistral!, te mandé un comentario sobre el mismo, que ignoro que haya llegado a su destino.

El Pretor (wassap) dijo...

Es una pena que no te haya llegado, era extenso porque me gustó tanto que lo he leído y releído varías veces. De nuevo te has superado y todos hemos quedado encantados. No exagera Javier Campos al decir que te ve en un futuro en la Tello Téllez. Sería algo grande para tí, ya te dice el Trauma que esa es tu vocación. ¡Ánimo! Y sigue deleitándonos con la brillantez de tu pluma.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Que persona tan culta como Buesa merced opine que mis relatos se le hacen cortos, por ser amenos, y por los detalles, que para vos son la esencia de la descripción, es para este humilde Plumilla una motivación. Me alegro de corazón.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Amigo César, no te quepa la menor duda de que me llegan tus palabras al corazón, me motivan, más aún cuando aprecias que tengo cariño a la Basílica, y he sido capaz de transmitir la importancia de ese extraordinario monumento.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Me llegan amigo Pretor tus palabras llenas de aprecio y emoción, más cuando provienen de un licenciado y estudioso de la historia y del mundo del arte. Si piensas que me he superado, puede que tengas razón, pero el escrito que queda por publicar: “Invierno en la Basílica”, puede que sea aún mejor. Mi agradecimiento más sincero, y siento no haber podido leer tu escrito inicial, misterios de la informática. Gracias gran amigo.

Julián González Prieto dijo...

Hermosa descripción, amigo Alfonso: De pequeño la conocí, por fuera, cuando visitaba a mis primos en Venta de Baños, pero no le daba importancia. De mayor, ya lejos de Palencia, supe de su grandeza histórica y monumental. Ahora ya sé a quien recurrir para conocerla como la gran joya que es, la Basílica de San Juan de Baños. Me citaré con sus mejores guías, Alfonso y Víctor, para que me la muestran y disfrutar en plenitud. Gracias anticipadas.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Amigo Julián cuanto honor recibir estas palabras tuyas de apoyo que tanto me motivan y me hacen admirar más aún a tu persona. Queda pendiente esa cita con Víctor y con migo, un amigo como es Víctor es receptivo a mis amigos. Este domingo finaliza su contrato de dos años, pero no olvidará jamás su querido monumento, y lo volverá a visitar con frecuencia porque forma parte ya de su vida.
Gracias Julián.

El Aupa dijo...

Amigo Alfonso, como siempre magnífico repertorio dedicado a un pueblo, Baños de Cerrato, que es bien conocido gracias a su famosa basílica a la que dedicas buena parte de este recorrido por los diferentes sitios del pueblo.
Has tomado muy buena nota del guía, eso demuestra lo magníficamente que lo reflejas con tu plumilla y eso es muy difícil.
Una vez más enhorabuena por tu habilidad como gran escritor.
Un abrazo campeón.

Calimero dijo...

Buenísimo el artículo. Uno vive la visita y la explicación del guía como si estuviera allí.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Cuanto honor amigo José Luis, recibir de ti esos cariñoso halagos, creo que ahora mismo el guia Víctor Andrés y somos amantes de este monumento tan bello y único.

Alfonso Santamaría Diez dijo...

Josema, desde tu Universidad de Valladolid, es un honor que me leas con tanta atención y atiendas desde sus aulas mis explicaciones.

El Fonta dijo...

Alfonso buen artículo, Lo describes y ensalzas de tal forma que parece más grande de lo que ya es. Enhorabuena por estos artículos.

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