Personalmente, confieso que no deseo volver hacia atrás en el tiempo, ni en la edad. Pero sí me gustaría ver por un agujero el año 3000: las ciudades, las casas, los coches, los servicios... todo en general.
Me imagino que todo el ingenio ahora mostrado servirá para que exclamen las generaciones venideras: "¿Cómo podrían vivir aquellos antepasados nuestros con tantas carencias, de semejante forma...?
Pero no nos desviemos del asunto que hoy nos convoca: la eterna juventud. Uno de los libros más viejos de que se tiene noticia es el "Poema de Gilgamesh", donde su protagonista ambiciona la inmortalidad y le ruega al sabio Utnapishtim que le revele el lugar donde se encuentra la planta que da la eterna juventud.
La condesa húngara
Uno de los casos más sobrecogedores relacionados con este anhelo de mantener la lozanía a cualquier precio, es el de la Condesa húngara Erzébet Báthory, en una crónica de terror que tiene lugar allá por el año 1600. No se sabe bien si lo soñó o si alguien le dijo que bañándose en sangre de jóvenes sacrificados podría mantenerse joven para siempre, pero tan degenerada debía estar por dentro, que se cuentan por cientos las mujeres sacrificadas para este fin, hasta que el conde Gyorsy Thurzo, primo suyo, acordonó el castillo y arrestó a todos sus habitantes.Todos los colaboradores de la condesa fueron juzgados y condenados a muerte en la ciudad de Bitcse. Todos, menos la condesa, a la que el rey Matías II de Hungría, le conmutó la pena de muerte por la prisión perpetua.
Aunque fue catalogada como la más prolífica "asesina en serie" de la historia, la evidencia de sus supuestos crímenes es escasa y se pone en entredicho su culpabilidad. Este asunto dio lugar a abultadas historias y relatos legendarios donde la obsesionada condesa se bañaba en la sangre de las vírgenes, a lo mejor, escena recurrente de Tarantino en la segunda parte de Hostel.
Imagen: Wikipedia
3 comentarios:
Cierto o no es una muestra del carácter vampírico de la llamada nobleza. Da igual que la chupen, la sangre, digo, se bañen en ella o, simplemente exploten a los demás por la gracia de Dios.
¿No le bastaría con la leche de burra que utilizaba Cleopatra?
Leyendas y leyendas.
Jajaja Es curiosa la historia. Y no tiene fin. Cada día surgen asuntos que no dejan de sorprendernos vengan de donde vengan.
La duda que me queda es si habrán trascendido todos los que existen o los que se dieron en un momento de la historia. En fin, sigamos investigando.
@Juan Carlos, @Javier, un saludo
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