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El pico Curavacas, de 2.524 metros, está considerada la cumbre más emblemática de la Montaña Palentina
En ocasiones se ha citado como la mayor elevación de la provincia, pero esa categoría le corresponde a la cresta palentina de Peña Prieta, de 2.537 metros.
El Curavacas tiene su cara más conocida por el sur, pero ofrece un espectáculo de gran belleza en la cara norte: el pozo Curavacas y los pozos del Ves, lagunas de origen glaciar que alimentan el curso inicial del río Carrión. Como resultado de las exploraciones espeleológicas realizadas en la zona, se ha encontrado una de las mayores simas de la provincia, situada en el alto del Ves, con una profundidad de 322 metros. El conglomerado de materiales que componen esta montaña le proporciona un característico color verdinegro que procede de los líquenes que se adhieren a la roca. En sus faldas crece el brezo y el arándano y viven especies como el oso, el lobo o el rebeco. Más accesible en verano, la montaña queda en invierno reservada a los especialistas de mayor cualificación, dada la amenazante presencia de la nieve y el hielo.
CUADERNO DE ANOTACIONES
¬ Comarca: Fuentes Carrionas.
¬ Altitud: 2.520 metros.
¬ Vertiente de ascensión más fácil: Sur, desde Vidrieros.
¬ Coordenadas: 42°58′45″N 4°40′06″O
¬ Famosas ascensiones:
Luis García Guinea, notario de Cervera, en 1947
El 16 de abril de 1957, la famosa "Cordada de los Faquires" intentó el ascenso al pico, pero un cambio brusco de tiempo ocasionó la muerte de tres de ellos, hecho que fue relatadado por Alejandro Diez Riol, uno de los supervivientes y llevado al cine por Tamara García en 2006.
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EL VÍDEO
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DIARIO PALENTINO-2018-2019
JOSÉ LUIS ESTALAYO
FROILÁN DE LÓZAR
2 comentarios:
Meses antes de salir publicado el reportaje en el periódico, a primeros de febrero de 2016 subimos por Resoba al Curavacas.
Ya lo hice anteriormente, hasta hace poco, una vez al año, subiendo con un grupo familiar desde Polentinos, muchas veces siendo joven, desde Lores; también por la pista de Casavegas; varios años en todo-terreno para bajar a Potes por una pista muy estrecha...
En esta ocasión me acompañaban Estalayo, que llegaba de México y que es el culpable de los extraordinarios reportajes gráficos y Marta Redondo, entonces corresponsal del Diario Paentino en Aguilar. Salvando el rincón mágico de las escaleras, llegamos hasta el pozo. Cada imagen me trae recuerdos de aquel momento y me anima a preparar una escapada hacia este punto tan especial de nuestra montaña en cuanto pase este confinamiento.
Y pensar que el pozo de Curavacas tiene tantas caras y todas muy bellas! Con neblina, sin neblina, con nieve, sin nieve con, hielo sin hielo..
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