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FIESTA DE LA TRILLA
Castrillo de Villavega
Volvió en 2022, tras ser suspendida durante dos años por el Covid 19
||||||||||-Primera quincena de agosto-||||||||||
Peculiar fiesta esta de Castrillo de Villavega con mucho arraigo y de las más multitudinarias de la provincia de Palencia, que se celebra el primer o segundo sábado de agosto desde hace 21 años, organizada por la Asociación La Trilla en colaboración con el Ayuntamiento de Castrillo de Villavega. La edición de 2023 se celebró el 12 de agosto. La peculiaridad de evento es que se recuerdan las labores del campo de nuestros antepasados: segar, hacer gavillas y cargar al carro, que nos trasladan al siglo pasado, antes de la mecanización agraria, cuando se empleaban aperos de labranza tirados por mulas, como carros, trillos, segadoras, veldadoras, y arado de la tierra.
El festejo comienza con un pasacalles en el que desfilan, con la música de los dulzaineros, las mulas que tiran de los carros, preparados para recoger la mies, o de las segadoras y otros aperos de labranza. Tras el desfile en una parcela se lleva a cabo la atractiva demostración de las labores del campo como homenaje a aquellos hombres, mujeres y jornaleros, que solo con sus manos y con los animales podían hacer este tipo de trabajos. Finalizada la demostración de estas tareas se organiza una comida popular en el plantío en la que el cocido castellano es la estrella, con entrega en la sobremesa de los trillos de honor.
Cuaderno de anotaciones
No es sencilla la organización de este evento que conlleva la preparación de una maquinaria que no se usa y tener los animales y aperos dispuestos, preparar comida para no menos de 900 comensales y tratar de que nada falle ese día. Para ello cuentan con la colaboración de unos 50 voluntarios. La XXI edición de este evento, que se encuentra entre los más concurridos y esperados de la provincia por la expectación que provoca la demostración de labores agrícola, del pasado, que en esta última edición de 2023 convocó a más de 1.200 espectadores, entre ellos dos autocares venidos de Cantabria, para contemplar el desfile y las labores de labranza con los jornaleros realizando una exhibición de estos trabajos, que disfrutan mucho los niños, en una experiencia inolvidable, sobre todo cuando montan en el trillo. Y no digamos para los más mayores con el recuerdo de aquellas faenas que algunos practicaron, o vieron realizar a sus padres. Una original fiesta esta de Castrillo de Villavega, que además atrae al público infantil con sus competiciones, charangas o degustación del “pancehuevo”, actividades complementarias, y conciertos de míticos grupos como Yedra, que volvió a Castrillo después de 40 años, o el grupo local Los Tavones y música DJ durante todo el fin de semana.
5 comentarios:
En efecto, Alfonso, una fiesta esta de la Trilla de Castrillo de Villavega, aquí en nuestra provincia, que concita un gran interés por lo que representa de un retazo de la vida de un tiempo pasado, en el que quién más quién menos, participó de una u otra manera, de adulto trabajando en esas duras faenas del campo o como niño metido siempre en medio, aunque colaborando también en su medida en algunos de los trabajos. De ahí ese elevado número de personas que se acercan hasta Castrillo para rememorar estas faenas del campo de un pasado reciente. Saludos.
Una fiesta realmente bonita y espectacular en un pueblo con un nombre muy castellano. Qué recuerdos me trae la trilla, recuerdos vividos en mi infancia cuando los niños subíamos al trillo y disfrutábamos de unas vueltas en las era, una auténtica diversión.Y no debe ser fácil, no, la organización de esta demostración, pues este es un oficio ya perdido y queda poca gente que lo haya vivido y que sepa hacer estas faenas, cada vez cobrará más mérito el mantener esta costumbre. Una fiesta de mucho colorido y mucha historia detrás, solo recordada por aquellos que lo vivieron, da mucha nostalgia ver los pocos aperos de labranza que van quedando olvidados, expuestos en los museos etnográficos o en las casas particulares como si fueran trofeos, pero es fruto de la mecanización de las labores del campo.
Amigo Alfonso: Cuánto me hace recordar tu preciosa semblanza sobre la Fiesta de la Trilla en Castrillo de Villavega, que fue mi primer y fugaz destino profesional, allá por 1958. Tengo grabada la trilla en Villafrades cuando, tantas veces, en mi infancia, ayudé a mis tíos en esta inolvidable faena. Me has hecho bien.
Cuanto me alegra amigos Javier Terán, FGC y Julián González Prieto que la Fiesta de la Trilla os traiga tantos recuerdos de esas actividades agrícolas ya desaparecidas, pero que al menos nosotros hemos conocido y disfrutado, y las recordamos. Las nuevas generaciones deben de acudir a fiestas de este tipo para saber cómo han cambiado las labores agrícolas con las mecanizaciones del campo.
Tiene que ser un día precioso, tanto para los que hemos conocido ese tipo de faenas, como para los que no. Que mérito tenían esas generaciones de labradores...Que no se pierda y algún año me encantaría poder acudir. Gracias Alfonso por tantos y tan buenos recordatorios...!!
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