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CURIOSEANDO POR SALAMANCA (I)
Plaza y Ayuntamiento
A mis amigos Manuel González Sánchez,
a su esposa Brigi, a Agustín Morín, y a
Francisca González del Castillo,
salmantinos de tronío.
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Placa conmemorativa del III Centenario de la muerte de Cervantes con texto del licenciado Vidriera. |
El día de las Candelas, fiesta patronal en Palencia (La Virgen de la Calle), nos espera Salamanca en un encuentro programado con un buen amigo y su señora, que después de veinte años, y de estar en ambas bodas (hace 40), perdimos el contacto. Y qué mejor placer que recorrer Salamanca de la mano de estas amistades, que hicieron de guías hospitalarios en un recorrido inolvidable por la bella ciudad charra, declarada Patrimonio de la Humanidad, por la Unesco en 1988. Visitar Salamanca es encontrarse con una capital única, con un centro urbano semejante en su colorido, debido a la piedra de Villamayor de Armuña, que se adapta a la perfección al estilo plateresco, provoca en sus edificios una tonalidad similar, y convierte a la capital charra en “Ciudad Dorada”. No hay más que acercarse a la Plaza Mayor, la Clerecía, las dos Catedrales, la Universidad o el Palacio de Monterrey para quedar impresionado por la belleza y singularidad de estos edificios.
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| Foto de la plaza mayor |
La Plaza Mayor
Qué emoción pisar la plaza de las plazas, disfrutar de su ajetreo sentado en una terraza, para darte cuenta de que, sin duda, estás en la mejor plaza del mundo de estilo barroco y en el corazón de la ciudad. Un recinto que respira perfección y envergadura, que invita a recorrerlo palmo a palmo; detenerte en sus columnas y medallones; admirar esas uniformes y bellas balconadas, tan bien cuidadas con sus atractivos ventanales y sus cuarterones centenarios. En esta impecable plaza el turista pasa el tiemplo distraído, se recrea en la contemplación de un monumento único que se disfruta en toda su integridad. Continúa el placer si entras en el popular Café Novelty, el local con más solera que lleva en la Plaza Mayor, nada menos que desde 1905, y en plena guerra civil fue sede de Radio Nacional de España. El Novelty se cobija bajo los soportales que aguantan el edificio de la Casa Consistorial. Al entrar en el Novelty puedes saludar a Gonzalo Torrente Ballester, hablar con él, y ver cómo te mira impasible con sus gafas de culo de botella, apoyado en su cachaba. Qué placer conversar mentalmente con este escritor universal, gallego y salmantino que te habla y te recuerda a los “Gozos y las sombras”. Novelty huele también a Unamuno, a Umbral, y a Carmen Martín Gaite, me imagino sus tertulias de ambiente cargado por el humo de aquellos cigarrillos de petaca.
Contemplar de día la Plaza Mayor salmantina permite descubrir su cosmopolita belleza, más aún cuando se admira la magia del cambio de sus piedras al antojo de la luz. No es menos hermosa esta plaza cuando se ilumina al acabar el día, se transforma con el crepúsculo, mientras se encienden sus incontables farolas, cuya luminiscencia resalta en todas las edificaciones y en cada ornamento. Brilla de forma especial el edificio de la Casa Consistorial, sus banderas y sus edificios anexos.
Es una gozada recorrer el ayuntamiento salmantino de la mano de Brigi, nuestra amiga, antigua trabajadora del consistorio. Nos espera su compañera y amiga que nos lleva a despachos, balconadas y buhardillas. Cuánto honor salir al balcón en el que se pronuncia el pregón, y se lanza el chupinazo que anuncia el inicio de las fiestas. Un privilegio contemplar desde esta balconada toda la Plaza Mayor, maravilloso regalo que mi mujer y yo nunca olvidaremos. Pero aún nos queda por ver la Sala de Visitas y el Salón de Plenos, y bajar y subir por esa imperial escalera que recuerda a Unamuno. Allí está su busto en un pedestal que parece observar y controlar a quien baja o sube. Señorial la Sala de Visitas, con óleos, esculturas, alfombra de gran belleza, un salón de película, que contrasta con la modernidad de su Sala de Plenos.
Contemplar de día la Plaza Mayor salmantina permite descubrir su cosmopolita belleza, más aún cuando se admira la magia del cambio de sus piedras al antojo de la luz. No es menos hermosa esta plaza cuando se ilumina al acabar el día, se transforma con el crepúsculo, mientras se encienden sus incontables farolas, cuya luminiscencia resalta en todas las edificaciones y en cada ornamento. Brilla de forma especial el edificio de la Casa Consistorial, sus banderas y sus edificios anexos.
El ayuntamiento
Es una gozada recorrer el ayuntamiento salmantino de la mano de Brigi, nuestra amiga, antigua trabajadora del consistorio. Nos espera su compañera y amiga que nos lleva a despachos, balconadas y buhardillas. Cuánto honor salir al balcón en el que se pronuncia el pregón, y se lanza el chupinazo que anuncia el inicio de las fiestas. Un privilegio contemplar desde esta balconada toda la Plaza Mayor, maravilloso regalo que mi mujer y yo nunca olvidaremos. Pero aún nos queda por ver la Sala de Visitas y el Salón de Plenos, y bajar y subir por esa imperial escalera que recuerda a Unamuno. Allí está su busto en un pedestal que parece observar y controlar a quien baja o sube. Señorial la Sala de Visitas, con óleos, esculturas, alfombra de gran belleza, un salón de película, que contrasta con la modernidad de su Sala de Plenos.
Para saber más, en Curiosón
ALFONSO SANTAMARÍA
Cuaderno del autor
CURIOSEANDO POR SALAMANCA - ALFONSO SANTAMARÍA DIEZ
12 comentarios:
Bonito reportaje, Alfonso, en relación con tu reciente visita a Salamanca, mostrándonos tus dotes de gran observador a través de estas líneas, con las que nos acercas a esa bonita ciudad castellana, donde se respira arte y cultura por todos los costados. Nos muestras, de momento, sólo la Plaza Mayor y el Ayuntamiento. Pero ya vemos a través de tus palabras cómo sientes cada uno de los lugares; y ya estamos deseando que aparezca la siguiente entrega para seguir admirando a esa ciudad. Saludos.
Bonita visita a mí querida ciudad de Salamanca y con qué pasión e interés lo narras, empezando por uno de los lugares más emblemáticos, la Plaza, de aquí parte todo. Se ve que dusfrutasteis y qué tuvisteis un día espléndido, es cuando mejor se aprecia la ciudad, con la luz del sol. Emocionante tu encuentro con la estatua de Torrente Ballester y la subida al ayuntamiento y las vistas que desde allí se aprecian. Queda mucho por recorrer, pero ya nos lo irás relatando. Si ya de por sí, es una ciudad bonita, con tu
emotiva n narración sentimos que debemos apreciarla aún más, sobre todo los que estamos tan cerca. Espero el capítulo siguiente con ganas y emoción
No se conoce una ciudad en cuatro días. Y a todos los que vivimos a lo grande el viaje a otros lugares, para conocer pueblos y ciudades del mundo, nos gusta que otros viajeros nos cuenten su experiencia. Eso es lo que hace sin descanso Alfonso, cronista y colaborador de los más curiosos. Vamos a recorrer esta ciudad encantadora en varias entregas. Esperamos estar a la altura y que sean de su agrado.
Un artículo muy interesante. Visité Salamanca hace años, gracias por traerme todos esos recuerdos de nuevo.
Un saludo desde las Rías Baixas
Excelente promoción de Rias Baixas, Sara. Gracias por compartir.
Recorrer una ciudad de la mano de unos lugareños es un auténtico privilegio. Y conocer Salamanca con Alfonso Santamaría, ha tenido que ser por lo menos, divertido. Salamanca es una ciudad joven, universitaria y alegre. Eso se nota vayas donde vayas. Para mi, Salamanca es una de la s joyas de España. Esperamos el próximo capítulo con impaciencia. Alfonso, que tu vales mucho y te cunde el tiempo que no veas...no se como lo haces. Un placer leerte, escribas lo que escribas. Un abrazo amigo.
Contigo hacemos el viaje juntos gracias a tu información y los detalles que compartes además de las imágenes. Enhorabuena. Un abrazo
Que post más bonito te ha quedado, nos han encantado los pequeños detalles que nos cuentas, como el de la piedra. Gracias por compartir! 😉 Saludos! 🙋♂️🙋♀️
Cuanta satisfacción me producen estos comentarios, después de mi viaje a la bella Salamanca, que observé con intensidad como dice Terán. Se siente satisfecha FGC con lo que relato sobre su “querida ciudad”, de mi paso por la plaza y por el ayuntamiento, además del saludo a Torrente. A Froilán de Lózar, viajero incansable gusta de que otros le contemos nuestros viajes. Sara, desde las Rías Bajas, ha vuelto a recordar Salamanca, me parece genial. Mi amigo Julius estima que “Salamanca es una de las joyas de España”, no tengo ninguna duda. Agradezco a Nuria de Espinosa que haya viajado conmigo, y Viajantes también.
Todos estos comentarios son motivaciones que me ayudan a escribir otra nueva entrega el próximo 14 de febrero, que hablaré de la Casa Lis.
Ya ha pasado una semana desde tu visita a Salamanca que sirvió para despertar de mi rutina y percatarme de que soy un afortunado de vivir en esta monumental ciudad. Tus descripciones y comentarios han ido eliminando ese polvillo que día a día se acumula con la vida rutinaria.
Gracias por tu visita que espero no sea la última y sobretodo gracias por lo que más valor tiene: tu amistad.
Manuel González
Así es ha pasado una semana, pero tenemos más de 40 años de amistad fortalecida en este mes. Vendrán más días por tu bella ciudad y por la mía, no vamos a desaprovechar lo que el tiempo impidió porque el valor de la amistad es evidente y lo mejor que te puedes encontrar, en Palencia, o Salamanca.
Mi próxima publicación sobre Salamanca, referida a la casa Lis, se publicará el próximo día 21 de febrero, no el 14 como he dicho por error. Gracias amigos.
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